Hasta la macrista Fundación Pensar habla mal de la economía de Milei
Con el informe “Dr Jekyll y Mr Hyde” como telón de fondo, la Fundación Pensar —brazo de análisis del PRO— puso sobre la mesa una dura crítica al rumbo económico del gobierno de Javier Milei. En el documento, sus autores advierten que la denominada “primarización” de la economía y la apertura indiscriminada de importaciones está dejando de manifiesto la fragilidad de los acuerdos políticos, incluidos los sellados en el Pacto de Mayo, y pone en jaque la institucionalidad que alguna vez se creyó inamovible.
Encabezada por la ex gobernadora y diputada María Eugenia Vidal, la fundación defiende su apoyo formal al oficialismo, pero no oculta su preocupación por el coste social de este programa: “Ese plan generó que todos seamos, de alguna manera, más pobres”, sostiene el informe. Además, el texto exige al Poder Ejecutivo que presente cuanto antes el proyecto de ley de Presupuesto para 2026, ya que el actual se basa en la partida aprobada en 2023. Según Vidal, “entendemos que en el primer año, por emergencia, no se trató; pero hoy, sin excusas, es imprescindible debatir el presupuesto, porque los recursos limitados no se administran con parches, sino con un plan serio”.
En sus páginas, el reporte registra que el salario real acumuló una caída del 6 % y se profundizó hasta un 12,6 % si se consideran los gastos fijos de quienes cobran un sueldo y lo destinan a cubrir servicios, alquiler y alimentos. Para los analistas del PRO, los desequilibrios estructurales “no se solucionan con recetas mágicas ni con equilibrios espontáneos, sino con gestión y definición clara de prioridades de gasto y su financiamiento”.
El documento también denuncia la creciente subordinación de sectores que hasta hace poco formaban parte de los beneficios del esquema económico vigente. Según los autores, la megamonopolización global está convirtiendo a exaliados en meros espectadores de un reparto que les resulta cada vez más adverso. En ese sentido, critican el distanciamiento entre las corporaciones internacionales y los viejos grupos de poder locales, una fractura que también se reflejó en el debilitamiento de la “unidad” electoral que pretendía forjar el PRO con La Libertad Avanza.
A la par de este informe, varios gobernadores que en su momento suscribieron el Pacto de Mayo con el Ejecutivo nacional —entre ellos Ignacio Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Martín Llaryora (Córdoba)— elevaron su voz de alerta ante la creciente asfixia financiera por la merma en la coparticipación. Hoy participan de un foro en la Sociedad Rural, dejando en evidencia su distancia del gobierno central y desafiando las presiones para que rechacen en el Congreso leyes de pensiones, discapacidad y coparticipación que el FMI considera incompatibles con el “equilibrio fiscal”.
El cruce de denuncias remata con la amenaza de veto presidencial a cualquier norma que ponga en riesgo las cuentas públicas. En palabras de Jaldo: “Los 23 gobernadores tenemos vías institucionales y judiciales para defender lo que pertenece a nuestros provincias”. Pero el Ejecutivo ya anticipó que aplicará su poder de veto sin miramientos: “El pacto de Mayo se achica —parece decir—; hoy solo algunos tienen cabida en el plan del FMI”. Así, el presidente ratifica que la estrechez fiscal no admitirá ni atajos, ni tolerancias, ni acuerdos amplios.