Personas con discapacidad reclamaron en la Quinta de Olivos
Lo hicieron contra los recortes en las prestaciones para personas con discapacidad, denunciando que las condiciones empeoran cada vez más. La actriz Valentina Bassi, que tiene un hijo autista, señaló: «A pesar de lo difícil que es para este colectivo movilizarse, fuimos miles. Es nuestra forma de resistir al abandono y el ataque constante».
Miles de personas se congregaron frente a la Quinta de Olivos para reclamar contra los recortes en las prestaciones para personas con discapacidad, denunciando que las condiciones empeoran cada vez más. La protesta, organizada por entidades vinculadas a la discapacidad, fue la tercera en lo que va del año y la más multitudinaria hasta el momento. Los manifestantes entregaron un petitorio al presidente Javier Milei, similar al presentado en febrero, señalando que desde entonces no ha habido mejoras.
«Todo está peor«, expresó Daniel Lipani, vicepresidente de la Asociación de Institutos Educativos Privados Especiales (Aiepesa), quien advirtió sobre la crítica situación del sector. Instituciones educativas, centros de rehabilitación y prestadores de salud y transporte exigen un aumento urgente en las tarifas que fija el Estado a través del nomenclador oficial. Estas cifras, pagadas por obras sociales y el Programa Incluir Salud, permanecen congeladas desde hace meses, dejando a muchas entidades al borde del cierre. «Algunas escuelas están evaluando si podrán abrir el próximo año«, lamentó Lipani, calificando la situación como desesperante.
Testimonios de quienes enfrentan la crisis
María, vecina de Lomas de Zamora y madre de dos hijos con retraso madurativo y enfermedades poco frecuentes, relató su preocupación ante la posibilidad de perder la cobertura. «Mis hijos dependen de kinesiólogos, pedagogos y transportistas para tener una vida digna. Sin esa ayuda, sería imposible afrontarlo económicamente«, explicó.
Mariela, otra madre que participó de la marcha junto a su hija y su sobrina, ambas con discapacidades, destacó cómo el ajuste ya afecta la calidad de vida de los chicos en el Centro Terapéutico del Sur, en Florencio Varela. «Se recortaron las raciones de comida y el transporte ahora es compartido, lo que implica dobles recorridos«, contó.
La actriz Valentina Bassi también estuvo presente con su hijo Lisandro, un adolescente con autismo. Subrayó la importancia de la movilización: «A pesar de lo difícil que es para este colectivo movilizarse, fuimos miles. Es nuestra forma de resistir al abandono y el ataque constante«. Tras lo cual agregó: «Lo que me pasa como mamá de un adolescente con discapacidad es que siento que a la incertidumbre cotidiana que los padres y madres tenemos sobre el futuro de nuestros hijos, sobre qué grado de independencia van a poder conseguir, a esas preguntas que nos acompañan toda la vida, se le suma la incertidumbre de no saber si van a poder seguir yendo a las terapias de apoyo que necesitan, mañana mismo. Eso es estresante, desgastante y muy triste«.
El sistema está en jaque
Las organizaciones advirtieron que los recortes impactan en todos los aspectos del sistema: escuelas de día, hogares y centros terapéuticos se encuentran al borde del colapso por los bajos aranceles. «Siempre tuvimos que luchar por nuestros derechos, pero ahora es mucho más grave«, expresó Bassi.
La movilización frente a la Quinta de Olivos tuvo eco en otras ciudades como Rosario, Mendoza, Córdoba y San Miguel de Tucumán. Bajo el lema «Justicia, basta de quitas», miles alzaron su voz para exigir una respuesta urgente ante la crisis que afecta a las personas con discapacidad y sus familias.