El gobernador Kicillof en defensa del sector pesquero
En una reunión realizada en el Hotel Provincial de Mar del Plata, el gobernador Axel Kicillof y el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, recibieron a representantes de sindicatos y cámaras del sector pesquero para evaluar las implicancias de la Ley Ómnibus enviada por Milei al Congreso, un proyecto que propone modificar significativamente el régimen de pesca en Argentina. Durante el encuentro, se expresó un fuerte rechazo a la medida, que se teme afectará gravemente el empleo y la producción pesquera en la región.
Kicillof, al abordar el tema con la prensa, manifestó la posición contundente del gobierno provincial: «Rechazamos tanto la metodología como el contenido del proyecto de ley, ya que implica el remate de los recursos nacionales y pone en riesgo el trabajo local, la producción y las inversiones». El gobernador destacó la falta de consulta a los actores involucrados en la industria pesquera y subrayó la importancia de este sector en la provincia de Buenos Aires.
La propuesta del Gobierno Nacional contempla la implementación de un sistema de licitaciones internacionales, donde las cuotas de captura se subastarían al mejor postor. Esto eliminaría los requisitos actuales que condicionan la actividad pesquera al desembarco en puertos argentinos, el uso de embarcaciones de bandera nacional, las inversiones en el país y el fomento de la mano de obra local.
La aplicación de esta medida tendría un impacto negativo en toda la cadena productiva pesquera, generando incertidumbre e imprevisibilidad en el sector y afectando seriamente los puestos de empleo. Además, se limitarían las funciones del Consejo Federal Pesquero, restringiendo la capacidad de las provincias con litoral marítimo para establecer cuotas y aprobar permisos.
Desde Mar del Plata, Kicillof expresó su preocupación: «La implementación de esta ley afectaría a miles de empresas y familias de trabajadores dedicadas a la actividad hace muchas generaciones». Aunque reconoció que hay espacio para mejoras en el sector, afirmó que esta ley iría en sentido contrario, dejando sin empleo y sin industria nacional a miles de bonaerenses.
Finalmente, el gobernador advirtió sobre posibles presiones del Gobierno Nacional para obtener el apoyo de los gobernadores a cambio de recursos. Kicillof fue claro al respecto: «La provincia de Buenos Aires no va a aceptar ningún tipo de presión para acompañar medidas que perjudiquen al sector pesquero». Con esta postura firme, la provincia se suma a la defensa de la industria pesquera local en medio de las discusiones sobre el futuro de la legislación pesquera en el país.
