Avances para optimizar tratamientos del cáncer de mama
Un estudio internacional, liderado por especialistas del CONICET, determinó que en pacientes con cáncer de mama hormonodependiente, el uso de “firmas moleculares” permite predecir con mayor precisión, que los métodos tradicionales, la evolución de la enfermedad y orientar el tipo de tratamiento.
En un avance significativo para el tratamiento del cáncer de mama en Latinoamérica, un estudio reciente ha demostrado que los test de “firmas moleculares” son herramientas sumamente útiles para predecir la evolución de este tipo de cáncer en la región. Estos test, que ya han mostrado su eficacia en mujeres de Europa y América del Norte, ahora también prometen mejorar la calidad de vida de las pacientes latinoamericanas y optimizar los recursos del sistema de salud.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista The Oncologist, fue liderado por un equipo de investigadores del CONICET. Estos especialistas compararon los resultados de los test de firmas moleculares con los métodos tradicionales de diagnóstico utilizados en la región y encontraron que los test moleculares no solo son más precisos, sino que también podrían evitar tratamientos innecesarios como la quimioterapia, mejorando así el bienestar de las pacientes.
Las “firmas moleculares” se utilizan en los llamados cánceres de mama “hormonodependientes”, que representan alrededor del 70% de todos los casos. Dentro de este grupo, existe un tipo de tumor denominado «luminal B» que tiene una evolución más agresiva y suele requerir quimioterapia. En cambio, el subtipo «luminal A» responde bien solo con terapia hormonal, lo que permite evitar la quimioterapia cuando no es necesaria.
Estos test, disponibles desde hace más de una década, funcionan a través de algoritmos que analizan la actividad genética dentro de los tumores. Este análisis permite determinar con mayor precisión el tipo de tumor y predecir su evolución, ayudando a los médicos a decidir el mejor tratamiento para cada paciente.
Según Andrea Llera, coordinadora del estudio y destacada investigadora del CONICET, los resultados de estos test son cruciales para mejorar la predicción de la evolución de la enfermedad a 5 o 10 años. Sin embargo, debido a su costo, en la mayoría de los países de Latinoamérica se siguen utilizando análisis de marcadores inmunohistoquímicos, que son menos precisos.
El estudio, que forma parte de una colaboración con la Red Latinoamericana de Investigación en Cáncer (LACRN), evaluó siete firmas moleculares diferentes en un grupo de pacientes latinoamericanas. Los resultados mostraron que al menos tres de estos test predecían con mayor certeza la recurrencia del cáncer en comparación con los métodos tradicionales.
La evidencia obtenida en este estudio podría ser clave para analizar el costo-beneficio del uso de estos test en Latinoamérica. No solo permitirían reducir el número de quimioterapias innecesarias, sino que también aliviarían la carga sobre el sistema de salud, evitando visitas recurrentes a emergencias y pérdidas de días laborales debido a los efectos secundarios de la quimioterapia.
Finalmente, Llera destacó que el impacto de las “firmas moleculares” va más allá del ámbito clínico, influyendo también en el diseño de políticas públicas relacionadas con el tratamiento del cáncer. En Argentina, el Instituto Nacional del Cáncer (INC) ya está al tanto de estos prometedores resultados, lo que subraya la relevancia de este estudio en la región.En un avance significativo para el tratamiento del cáncer de mama en Latinoamérica, un estudio reciente ha demostrado que los test de “firmas moleculares” son herramientas sumamente útiles para predecir la evolución de este tipo de cáncer en la región. Estos test, que ya han mostrado su eficacia en mujeres de Europa y América del Norte, ahora también prometen mejorar la calidad de vida de las pacientes latinoamericanas y optimizar los recursos del sistema de salud.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista The Oncologist, fue liderado por un equipo de investigadores del CONICET. Estos especialistas compararon los resultados de los test de firmas moleculares con los métodos tradicionales de diagnóstico utilizados en la región y encontraron que los test moleculares no solo son más precisos, sino que también podrían evitar tratamientos innecesarios como la quimioterapia, mejorando así el bienestar de las pacientes.
Las “firmas moleculares” se utilizan en los llamados cánceres de mama “hormonodependientes”, que representan alrededor del 70% de todos los casos. Dentro de este grupo, existe un tipo de tumor denominado «luminal B» que tiene una evolución más agresiva y suele requerir quimioterapia. En cambio, el subtipo «luminal A» responde bien solo con terapia hormonal, lo que permite evitar la quimioterapia cuando no es necesaria.
Estos test, disponibles desde hace más de una década, funcionan a través de algoritmos que analizan la actividad genética dentro de los tumores. Este análisis permite determinar con mayor precisión el tipo de tumor y predecir su evolución, ayudando a los médicos a decidir el mejor tratamiento para cada paciente.
Según Andrea Llera, coordinadora del estudio y destacada investigadora del CONICET, los resultados de estos test son cruciales para mejorar la predicción de la evolución de la enfermedad a 5 o 10 años. Sin embargo, debido a su costo, en la mayoría de los países de Latinoamérica se siguen utilizando análisis de marcadores inmunohistoquímicos, que son menos precisos.
El estudio, que forma parte de una colaboración con la Red Latinoamericana de Investigación en Cáncer (LACRN), evaluó siete firmas moleculares diferentes en un grupo de pacientes latinoamericanas. Los resultados mostraron que al menos tres de estos test predecían con mayor certeza la recurrencia del cáncer en comparación con los métodos tradicionales.
La evidencia obtenida en este estudio podría ser clave para analizar el costo-beneficio del uso de estos test en Latinoamérica. No solo permitirían reducir el número de quimioterapias innecesarias, sino que también aliviarían la carga sobre el sistema de salud, evitando visitas recurrentes a emergencias y pérdidas de días laborales debido a los efectos secundarios de la quimioterapia.
Finalmente, Llera destacó que el impacto de las “firmas moleculares” va más allá del ámbito clínico, influyendo también en el diseño de políticas públicas relacionadas con el tratamiento del cáncer. En Argentina, el Instituto Nacional del Cáncer (INC) ya está al tanto de estos prometedores resultados, lo que subraya la relevancia de este estudio en la región.