«Ruidazo» de distintos gremios ante el Congreso
En la tarde de ayer, empleados del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) se congregaron junto a colectivos universitarios, personal del Hospital Garrahan, Vialidad Nacional y delegados gremiales para realizar un masivo “ruidazo” frente al Congreso. La protesta se organizó en repudio al decreto de necesidad y urgencia (DNU) que, según denuncian, vacía de atribuciones y recursos a la entidad.
Critican la política de “desguace”
El DNU, impulsado por el ministro de Desregulación y Transformación, Luis Sturzenegger, se presentó bajo el pretexto de optimizar la “gestión pública”. Sin embargo, los trabajadores advierten que las disposiciones eliminan la autonomía del INTI, recortan los ingresos propios —que representan un 35 % de su presupuesto— y amenazan con despedir al 30 % de la plantilla, alrededor de 1.140 personas. “Con esta medida estamos perdiendo nuestra capacidad de transferencia tecnológica, de certificación de productos y de garantizar estándares de medición en todo el país”, explicó Giselle Santana, del departamento de Calidad de Mediciones.
Impacto sobre las economías regionales
El INTI mantiene vínculos estrechos con pymes y productores locales de diversas regiones argentinas. Al despojar al organismo de sus fondos generados por servicios técnicos y de investigación, “se está atacando directamente al desarrollo industrial y agropecuario nacional”, advirtieron los manifestantes. Denuncian que la reforma atiende más los intereses de grandes grupos monopólicos y de mercados extranjeros que las necesidades de los trabajadores y de las economías regionales.
Poco antes de la movilización, la jueza Martina Forns dictó una medida cautelar a solicitud de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), frenando la aplicación del DNU por seis meses. No obstante, el gobierno anunció que apelará la decisión y que, en caso de que el Congreso vote la derogación del decreto, el Poder Ejecutivo procederá a vetarlo.
Convocatoria a la unidad
En voz de sus voceros, los empleados del INTI llamaron a la sociedad y a los legisladores a “no permitir el desmantelamiento de un organismo clave para la industria y la ciencia argentinas”. Advierten que, de prosperar el recorte de funciones y personal, el país perderá un pilar fundamental para el control de calidad y la innovación tecnológica.
La jornada concluyó con la promesa de nuevas acciones de protesta y con el reclamo de que se restituya el presupuesto y la estructura original del INTI, único modo, aseguran, de garantizar un desarrollo productivo federal y sostenible.