Política

Cristina y Kicillof juntos en el acto de Abuelas

Recordamos que la tensión entre Axel Kicillof y Cristina Fernández de Kirchner se ha intensificado desde que la ex presidenta anunció su intención de presidir el Partido Justicialista (PJ). Esta situación se volvió más palpable tras el acto del Día de la Lealtad en Berisso, que muchos en el entorno de Cristina interpretaron como un lanzamiento de la campaña presidencial presidencial de Kicillof. Ante esto, Oscar Parrilli, senador y figura cercana a la ex mandataria, demandó un apoyo claro y contundente de Kicillof hacia su candidatura, generando expectativa y presión en el ambiente político.

Kicillof, en respuesta a las exigencias, optó por emitir una carta pública. Sin embargo, su mensaje no fue un respaldo directo a Cristina, ya que, aunque expresó su rechazo a la candidatura de Ricardo Quintela, dejó en claro su intención de evitar una confrontación interna. «No estoy dispuesto a librar una guerra interna», afirmó, reiterando su deseo de mantener una «unidad respetuosa y peronista».

La situación refleja un dilema significativo dentro del oficialismo. Por un lado, la figura de Cristina sigue teniendo un peso considerable en la política argentina, y su búsqueda de liderazgo dentro del PJ es vista como un movimiento estratégico. Por otro, Kicillof, como gobernador de la provincia de Buenos Aires, tiene que equilibrar su posición en un entorno que demanda cohesión pero que también enfrenta diferentes aspiraciones y expectativas.

El desenlace de esta tensión no solo afectará las dinámicas internas del PJ, sino que también influirá en la construcción de alianzas y estrategias electorales de cara a las próximas elecciones. En este contexto, la llamada a la «unidad» de Kicillof se convierte en un llamado crucial, que busca mantener la cohesión en un momento de incertidumbre y desafíos políticos. Sin embargo, la falta de un pronunciamiento claro podría perpetuar las divisiones y tensiones que actualmente afectan al peronismo.

De todas formas el encuentro de ambos en el acto de los 47 años de lucha de las Abuelas, abrió un manto de esperanzas para los afiliados peronistas que entienden fundamental, lograr un marco de unidad partidaria entre ellos a la hora de hacerle frente al gobierno de Milei.

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