Duro enfrentamiento entre IOMA y FEMEBA
El conflicto entre IOMA, la obra social del Estado bonaerense, y sus prestadores se intensifica en varios distritos de la provincia, generando preocupación y malestar en más de 2 millones de afiliados. Desde la suspensión de prestaciones en clínicas hasta desacuerdos con odontólogos y farmacéuticos, la situación refleja un panorama complicado en el sistema de salud provincial.
La liberación de precios por parte del gobierno nacional y la inflación en ascenso afectan directamente a una obra social que se ve presionada por demandas crecientes y recursos limitados. Cuatro legisladores provinciales han presentado proyectos de ley con críticas contundentes hacia las autoridades de IOMA, buscando respuestas y soluciones a esta crisis.
El diputado del PRO, Fernando Rovello, ha solicitado la interpelación del presidente de IOMA, Homero Giles, para que explique la suspensión de prestaciones y la falta de cobertura en medicamentos en diversas localidades de la provincia.
El conflicto se agrava con denuncias de deudas millonarias por parte de la Federación Médica de la provincia de Buenos Aires (FEMEBA), que representa a cerca de diez mil profesionales afiliados a través de círculos médicos en los 135 distritos bonaerenses. Este enfrentamiento se da en paralelo a la presentación de un proyecto legislativo liderado por la radical Flavia Delmonte, que propone la desregulación de la salud en el sector público bonaerense.
Desde IOMA, se califica esta situación como una maniobra política, vinculada a la histórica disputa con FEMEBA. La federación, que administra y cobra ante prepagas y obras sociales, se queda con el 25% del dinero transaccionado, siendo IOMA su principal fuente de ingresos. La federación, a su vez, se convierte en un actor clave en la escena política y económica de la provincia.
La realidad económica presenta un escenario complejo, donde la masa de recursos de IOMA no crece al mismo ritmo que las erogaciones. La disputa entre el financiador (IOMA) y el intermediario (FEMEBA) se intensifica, sumada a las tensiones entre la federación y los círculos locales, que ven a FEMEBA como un socio voraz.
Este conflicto no solo es económico, sino también político. FEMEBA se convierte en un espacio desde el cual se critica al gobierno provincial, mientras que dirigentes como el intendente de Tandil, Miguel Lunghi, han aprovechado la plataforma para cuestionar a IOMA y ganar visibilidad.
La politización del conflicto se da en un contexto más amplio, donde figuras como el intendente de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, y el gobernador Axel Kicillof, protagonizan debates sobre el sistema de salud. Las declaraciones cruzadas entre ambos reflejan tensiones políticas que afectan a los ciudadanos y profundizan la crisis en el sistema de salud provincial.
En definitiva, el conflicto entre IOMA y sus prestadores no solo pone en evidencia problemas económicos y de gestión, sino también disputas políticas que dificultan la búsqueda de soluciones efectivas para los millones de afiliados afectados. Es necesario un diálogo constructivo y acciones concretas para garantizar el acceso a la salud en la provincia de Buenos Aires.
