Vecinos del Delta comenzaron el año sin luz
Entre los muchos daños que dejó el temporal del 17 de diciembre, el corte del suministro eléctrico es uno de los que más afecta aún a cientos de vecinos del Delta de Tigre y San Fernando.
Más allá del coyuntural efecto del fenómeno climático, Daniel Bracamonte, referente de la organización isleña del Movimiento De Raíz, destaca la falta de inversión de Edenor en la isla, a pesar de que los residentes pagan tarifas comparables a las del continente. «Cables con hasta 80 años de antigüedad -sostiene Bracamonte- pone de manifiesto la negligencia de la empresa concesionaria en mantener una infraestructura eléctrica segura y eficiente».
Francisco Parra, para contribuir a exponer y poner en evidencia pública los inco0nvenientes que padecen los isleños, subió una petición a Chance.org para sumar firmas al reclamo.
En la misma se sostiene: «Los isleños necesitamos soluciones AHORA. Frente a la grave crisis producida por la tormenta y la sudestada, miles de habitantes de las islas del Tigre y San Fernando se encuentran abandonados a su suerte. Fuentes de Edenor hablan de que esta situación podría extenderse por 2 semanas, como mínimo. Pese a la solidaridad entre vecinos estamos viviendo situaciones que ya han cruzado el límite de tolerancia».
También exigen «la conformación de un Comité de Crisis integrado por la Intendencia, Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Edenor y representantes de los vecinos. Es necesario que dicho comité planifique los trabajos de reparación del tendido eléctrico, el retiro de los árboles caídos y la tala de aquellos que impliquen un riesgo para la población. Para esto entendemos que deberían crearse nuevas cuadrillas que estén a cargo del Municipio».
Sostienen que el Comité de Crisis debería identificar a los vecinos más afectados o carenciados, para poder llevarles toda la ayuda necesaria. «Debe realizarse en forma urgente un censo de las viviendas destruidas o dañadas, y proveer a lxs afectadxs de lugares de acogida transitorios e insumos, durante el tiempo que dure la reconstrucción de las viviendas dañadas».
El petitorio también exige que «para mitigar los incrementos de gastos que han sufrido los isleñxs por esta crisis, pedimos que el boleto de lanchas se reduzca al 50 %, mientras dure está situación. Exigimos asimismo que, para facilitar los traslados al continente, se libere el amarre público y privado».
Por último sostienen que «se debe declarar la emergencia sanitaria y poner los medios preventivos y de evacuación necesarios al servicio de la población. Las partidas del presupuesto municipal y provincial deben reorientarse para poder sostener el plan de contingencia».
El sábado pasado, un grupo de 150 vecinos se movilizó hacia la estación fluvial a bordo de unas 40 lanchas, para evidenciar su problema y para exigir que los trabajos que se están llevando adelante, se intensifiquen para adelantar su conclusión. En la primera sección la acción de Edenor permitiría progresivamente ir devolviéndoles a los isleños la luz. Más complejo es el panorama en la segunda y tercera sección de Islas, donde los problemas son mucho más estructurales.
La falta de luz les está produciendo un serio problema a quienes viven del turismo, ya que las reservas se han ido cancelando ante lo indeterminado de cuándo se solucionará el problema.
Uno de los afectados manifestó a Prensa Chica: «Esperamos las épocas pico de turismo como para hacer una diferencia que nos compense las temporadas bajas, y ahora terminaremos con las manos vacías si no se intensifican los trabajos».
Foto: Télam
